A Fundación San Rosendo convirte a súa especialización asistencial no mellor aliado para dar resposta ás familias

El descenso de las rentas familiares y los recortes en la Ley de la Dependencia han obligado a la Fundación San Rosendo a realizar un “esfuerzo mayor” para poder “hacer frente a las necesidades de las familias gallegas” durante el año 2012.

El presidente de la Fundación, José Luis Gavela, explicó en una rueda de prensa para presentar el balance de actividades de 2012, que el número de ingresos las residencias de la Fundación se mantiene en el mismo nivel que años anteriores, siendo la ocupación del 95%, y que “el 90% de los ingresos registrados han sido de personas no válidas, con un alto nivel de dependencia, lo que representa un incremento significativo”. Además, la Fundación San Rosendo ha tenido que asumir servicios asistenciales por falta de una “respuesta inmediata” de otras instituciones.

Gavela Varela, informó que el “alto nivel de competencias de los más de 1.500 trabajadores”, junto con la certificación de calidad de los centros, ha permitido que la Fundación San Rosendo “esté mejor preparada para atender a las personas con mayores dificultades”. En esta línea, subrayó que el 70% de los cuidadores “ya disponen de la certificación profesional que la Xunta de Galicia exige para 2015” y que las residencias con más de 100 plazas cuentan con el certificado de calidad.

Además, destacó que en 2012 la red de centros de la Fundación San Rosendo se amplió a 66 centros, con la incorporación del Instituto Geriátrico Divino Maestro (Ourense). Durante este año, también entraron en funcionamiento los apartamentos tutelados de O Incio (Lugo).

Prioridades para 2013

Para el próximo año, la Fundación San Rosendo ha establecido como prioritario alcanzar la certificación de calidad en las residencias de Divino Maestro y Taboada (Lugo), así como incrementar el número de residencias certificadas, con menos de 100 plazas, y conseguir la certificación profesional de todas las cuidadores. El objetivo es “estar mejor preparados para atender las necesidades de las familias gallegas”, apuntó José Luis Gavela.

El Patronato de la Fundación San Rosendo aprobó el presupuesto conjunto de la institución, en el que se incluye la Fundación San Martín, que asciende a 44,5 millones de euros. “Representa un 1,69% más que el año pasado”, según indicó el secretario de la Fundación, Francisco Caseiro.

Los gastos de personal representan la partida más cuantiosa, que aumenta para asumir el incremento salarial, así como la incorporación del personal necesario para afianzar las actividades en las residencias de reciente puesta en marcha.

La inversión prevista para el año 2013 asciende a 4,10 millones de euros, que permitirá avanzar en las obras de la nueva residencia del concello de A Cañiza e iniciar las de las residencias de Vigo y Lobeira.

La residencia de A Cañiza, cuyas obras ya están en marcha, “contará con 130 plazas para personas asistidas y, a pleno rendimiento, dará empleo a 60 profesionales. Las obras concluirán en la primavera de 2014”, según explicó Julio Soto Varela, patrono de la Fundación San Rosendo.

Los ingresos principales de la Fundación San Rosendo proceden de las cuotas y contratos de los residencias, ya que representan el 97% de los ingresos totales. El restante 3% se divide entre ingresos extraordinarios (2%) y las subvenciones corrientes (1%). Como entidad sin ánimo de lucro el remanente que se pueda obtener se reinvierte en las necesidades que se detecten con el objetivo de garantizar los servicios asistenciales (mejoras en edificios, equipamiento, etc.)

20 años al servicio de las personas mayores

La Fundación San Rosendo lleva más de 20 años prestando un servicio asistencial a colectivos desfavorecidos de Galicia (personas mayores, discapacitados, etc.) a través de su red de centros compuesta por 66 residencias, la mayoría en entornos rurales donde la oferta privada es escasa, que suman más de 3.500 plazas, de las que sólo el 30% son concertadas. El equipo humano está formado por más de 1.500 trabajadores. La Fundación San Rosendo fue la primera institución en Galicia en certificar la calidad de sus centros mediante el reconocimiento europeo ISO 9001:2000